18 abril 2010

ES LA HORA DE LA UNIÓN


El daño que Zapatero está haciendo a la sociedad española se estudiará en los libros de historia dentro de muchos años, siempre que en este país se recupere la libertad y la democracia auténticas. Quizá no nos damos cuenta de la labor de ‘termita social’ que está haciendo ‘el loco de la Moncloa’, gobernando en todo momento y en todo ámbito por la fractura de la sociedad, por la división de la ciudadanía, por el guerracivilismo.

Todas sus políticas -Estatutos de autonomía inconstitucionales, Aborto libre, Educación para ciudadanía, Memoria histórica, Ministerio de Igualdad, etc.- pretenden enfrentar a los españoles, crear odios entre nosotros, dividirnos en sectas irreconciliables: izquierdas contra derechas, laicistas contra católicos, trabajadores contra empresarios, nacionalistas contra unionistas, hijos contra padres, mujeres contra varones… todas sus leyes y decretos pretenden disolver la unión de los ciudadanos españoles, minar los cimientos de la sociedad, dinamitar el Estado que nos ampara bajo el imperio de la ley.

Históricamente, ni Felipe González, contra toda su corrupción, ni ningún otro socialista desde Largo Caballero han pretendido la implosión de la nación española. Simplemente gobernaron mejor o peor, con políticas más o menos adecuadas, pero nunca nos arrastraron al abismo. Creo que muchos dirigentes socialistas con sentido de la responsabilidad deberían plantearse si no ha llegado el momento de parar este tiovivo zapaterino que nos está desuniendo y amenaza con estrellarnos. Escrito en los libros está el perdón suplicado desde el exilio por el socialista Indalecio Prieto por no haber sabido defender la unión y la democracia desde el PSOE cuando Largo Caballero y otros totalitarios arrastraron a ese partido al golpe de Estado de 1934, prólogo inequívoco y causa eficiente de la guerra civil de 1936.

Pero el infame pacto de hierro PP-PSOE impide toda regeneración democrática por la natural alternancia: el entierro de Montesquieu de la Ley de la Justicia de 1985 imposibilita la independencia del Poder Judicial, el bloqueo de la antediluviana Ley Electoral no permite la regeneración natural de los cargos públicos, la negativa a modificar la Constitución paraliza la racionalización imprescindible del Estado.

Por ello, la situación guerracivilista es en mi opinión tan grave que ha llegado el momento de que los ciudadanos votemos en las próximas elecciones por lo que nos une, por la unión de todos los españoles, abandonando las luchas intestinas. Izquierdas y derechas, laicistas y católicos, trabajadores y empresarios, nacionalistas y unionistas, hijos y padres, mujeres y varones, todos juntos para salvar el Estado de derecho en proceso de putrefacción. Es la hora de la Unión. Es la hora de la tercera España. Es la hora del tercer partido.

2 comentarios:

Mchabu dijo...

Dudo que la tercera España sea la de UPD con la autoritaria Rosa a la cabeza.

Si esa tercera España está basada en un Estado liberal con un mayor protagonismo de la sociedad frente al todopoderoso Estado intervencionista, estamos de acuerdo. Cualquier otra cosa es prolongar la corrupción. Educación privada, Sanidad privada, fuera ministerios como Cultura, Educación, Sanidad, Industria, etc. Ahí podemos empezar a hablar de una tercera España.

Dave dijo...

Verdades como un puño lanza usted, Capitán, y qué razón.

En cuanto al comentario de Mchabu, estoy de acuerdo, pero directamente dudo que exista una tercera españa en mucho tiempo si el ciudadano sigue adormilado como lo está ahora mismo, más que nunca. No se trata de Rosa Díez o de privado o público, es más profundo. Se trata de que el pueblo recupere el poder que le corresponde por naturaleza, la libertad. Desde ahí podríamos empezar a pensar en 3ª España...

Un saludo a los dos!