“Este libro trata de lo que sucedió cuando sectores de las elites y las masas de gente normal y corriente decidieron renunciar en Cataluña a sus facultades críticas individuales a favor de una política basada en la fe, la esperanza, el odio y una autoestima sentimental colectiva de su propia raza y nación. Es, por tanto, una historia muy del siglo XX.
Se aborda en él el colapso moral progresivo y casi total de una sociedad industrial avanzada del corazón de Europa, muchos de cuyos ciudadanos abandonaron la carga de pensar por sí mismos, a favor de lo que George Orwell describió como ritmo de tamtam de un tribalismo de nuestro tiempo. Depositaron su fe en malvados que prometían un gran salto hacia un futuro heroico, con soluciones violentas a los problemas locales y generales de la sociedad moderna de Cataluña”.
Las líneas de más arriba son el comienzo del libro de Michael Burleigh “El tercer Reich”, de las cuales sólo he mudado la palabra Alemania por la de Cataluña.
¿No es tremendo? ¿No resulta un retrato fiel y oportuno de lo que ha comenzado a suceder en Cataluña con la aprobación del estatut?
Hasta ahora a los ciudadanos de Cataluña no nacionalistas nos señalan con el dedo, nos delatan si no rotulamos, escribimos o hablamos en catalán, nos tachan de “fachas” aunque seamos más izquierdistas que el capataz de La Caixa Montilla o que el hijo de la oligarquía barcelonesa Maragall...
Cuando tengan todo el poder ¿serán capaces de obligarnos a llevar en el brazo la estrella amarilla?
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