17 noviembre 2007

CATORCE ¿SABIOS?


El inefable Caldera, uno de los ministros más ineptos de Zapatero, pero que tiene la virtud de tomarse largas 'vacaciones' de tanto en tanto, gracias a lo cual no encabeza el 'hit parade' de incompetentes de la Moncloa, nos ha anunciado la gran nueva: como al parecer no hay nadie en el PSOE que sea capaz de diseñar grandes ideas para el programa electoral que viene, han contratado a catorce sabios extranjeros, catorce intelectuales de prestigio mundial, incluyendo premios Nobel, que sin duda sabrán mucho más sobre las necesidades de los ciudadanos españoles en 2008 que los políticos e intelectuales españoles.

El problema de Zapatero es que, además de no tener programa, no tiene ministros. Porque a parte de la vice-presidenta, que es muy sectaria pero sin duda es una mujer inteligente y muy trabajadora, y algún ministro que no destaca porque se pone de perfil para pasar desapercibido como Solbes o Alonso, Zapatero sólo tiene personas ineficaces, ineficientes y además prepotentes.

El paradigma de la estulticia disfrazada de soberbia es la ministra de Fomento, pero ahí tenemos también cometiendo gravísimos desatinos al ministro de Exteriores, apagando a media Barcelona al ministro Clos, defendiendo a los terroristas que acosan al PP a la ministra Salgado, y las huellas que han dejado personajes de la farándula como las ex-ministras Calvo y Trujillo.

Pero vamos apañados con los catorce sabios internacionales. Iremos sabiendo más, pero para muestra basta un botón. O mejor tres. Una de las sabias del mundo mundial y premio Nobel es la kenyana Wangari Maatahi, que se distingue por justificar y aprobar uno de los mayores crímenes contra la humanidad hoy vigentes como es la mutilación del clítoris a millones de niñas, aduciendo la 'progre relativista' que se trata de una peculiaridad cultural que hay que respetar huyendo de todo etnocentrismo occidental.

Otro sabio es el economista norteamericano, famoso por ser el 'progre' más contrario al Progreso, Jeremy Rifkin, cuya catastrofista predicción económica de 1994 ha resultado ser el mayor ridículo de la historia de la economía mundial.

Y en fin, para terminar este aperitivo, nada como recordar a un 'obispo' británico de la 'Iglesia de Al Gore de los Santos de los Últimos Días', Nicholas Stern, cuyos apocalípticos informes sobre Medio Ambiente han quedado demostrados como miserables falsificaciones por eminentes científicos y ecologistas respetables como Bjorn Lomborg.

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