14 enero 2012

HAY QUE DEJAR DE ROBAR POR DOS AÑOS


A finales de los años 90, con Argentina en plena crisis económica, un dirigente peronista -Luis Barrionuevo- tuvo un momento de sinceridad asombroso y pronunció una frase que ha pasado a la historia: "si los políticos dejamos de robar durante dos años, se arregla la crisis".

'Mutatis mutandis', pero cambiando menos de lo que pareciera, es la receta que necesita España para salir de la crisis que nos sacude a los ciudadanos de manera inmisericorde. Rajoy nos ha doblado el espinazo a la clase media con el 'impuestazo', arguyendo que es una medida temporal por dos años para enjugar el desbocado déficit de las administraciones autonómicas. Pero si el diagnóstico es acertado, el tratamiento es mortalmente erróneo, porque la presión fiscal va a incrementar el principal problema económico, que es el desempleo.

La razón del monstruoso déficit de Estado que nos ha dejado el PSOE de Rubalcaba y Chacón es el despilfarro de las administraciones regionales, provinciales y municipales, unido a la corrupción que impera en todos los niveles políticos, desde la Monarquía al Tribunal Constitucional pasando por la administración de Justicia, desde el gobierno central a los ayuntamientos pasando por los niveles autonómico y provincial. Aceptado el diagnóstico, sólo cabe un tratamiento: extirpar de raíz el cáncer que corroe el Estado, dicho al modo argentino: "que los políticos dejen de despilfarrar y de robar por dos años".

Lo que significa sencillamente que hay que lograr una Justicia independiente para que persiga sin ocultaciones, dilaciones o indultos la corrupción que, contra lo que diga Rajoy, está generalizada y sobre todo es exuberante en las taifas autonómicas (Valencia, Baleares, Andalucía, Cataluña…)

Y por otro lado hay que reformar también la constitución para rediseñar el modelo regional y local: definir claramente las competencias del gobierno central para que no se repliquen en las autonomías, y eliminar de aquel las que se acepten como regionales, eliminar las diputaciones redundantes con las comunidades autónomas, fusionar los pequeños ayuntamientos, reformar y minimizar el Senado, y sobre todo reducir a escombros los gastos estructurales y corrientes de los parlamentos y gobiernos autonómicos. Es decir, borrar de la faz de la Tierra los 4.000 entes públicos para amiguetes y paniaguados, abrevaderos de la corrupción, privatizar o demoler las 13 tele-taifas regionales, eliminar los 17 defensores del pueblo, las 17 agencias meteorológicas, y los 17 etc. redundantes.

En definitiva, señores de la partitocracia imperante en España, dirigentes de la oligarquía PP-PSOE-IU-CiU-PNV: "Que los políticos dejen de despilfarrar y de robar. No por dos años, sino para siempre".

1 comentario:

José Ramón Benito Mendoza dijo...

Para que dejen de robarnos, además de una justicia independiente, necesitamos leyes independientes de la partitocracia imperante. Y estas dos condiciones solo las conseguiremos si los ciudadanos nos movemos y presionamos a las administraciones a través de las redes sociales y la calle.