29 mayo 2009

EL TERCER PARTIDO A EUROPA


En esta España fragmentada (Sosa Wagner dixit) y desvertebrada ya hace tiempo que intelectuales y ciudadanos comprometidos venían clamando por una tercera fuerza nacional, bisagra entre la izquierda y la derecha del 'establishment' permanentemente chantajeadas por los partidos nacionalistas, una izquierda confederal vendida y una derecha amarrada a los intereses de sus taifas regionales, un tercer partido que luchara por lo que nos une, que es el derecho de todos los españoles a la libertad y a la igualdad.

Surgieron núcleos en el País Vasco ensangrentado por los nacionalistas del tiro en la nunca -especialmente la iniciativa ciudadana Basta Ya- y luego en la Cataluña de nacionalismo obligatorio -la asociación de Ciutadans de Catalunya, luego partido-. Estos focos, y Madrid, y el resto de España, confluyeron en 2007 en la formación de UPyD, el embrión de ese tercer partido nacional que ha de vertebrar en un futuro la nación de ciudadanos que es España.

A pesar del boicot financiero y de la ocultación mediática este partido logró colocar a Rosa Díez en las Cortes en las elecciones generales de 2008, hazaña asombrosa teniendo en cuenta la ley electoral pensada para abortar cualquier intento de regenerar el sistema de bipartidismo atado a los nacionalismos que crearon inconscientemente en la transición. Este año ha logrado triplicar los votos en las elecciones autonómicas de Galicia y País Vasco, y un acta de parlamentario en esta última comunidad.

Sin duda UPyD ha de dar el siguiente paso en su camino de regeneración democrática a futuro, y lograr llevar su voz al parlamento europeo. El acta de Sosa Wagner está asegurada, pero sería importante que se presentaran en Estrasburgo uno o dos europarlamentarios más. Porque muchas cosas importantes para los ciudadanos españoles se deciden hoy en Europa, y el partido de Rosa10 defiende los derechos de los ciudadanos, no los de las ideologías, los territorios o las religiones. Porque es necesaria una España unida en una Europa fuerte.

Y porque España necesita que siga creciendo en todos los ámbitos el tercer partido nacional que vertebre la política y que regenere la democracia. Una bisagra necesaria para gobernar pero que defienda lo que nos une e impida el chantaje de las bisagras separatistas. Porque es necesario que en el futuro haya una importante fuerza nacional que abogue por la independencia completa del Poder judicial, por la democratización proporcional de la Ley Electoral, por la devolución al Estado central de los pilares de los derechos cívicos como son la Enseñanza y la Sanidad, y en definitiva por reformar la constitución violada por los partidos del 'establishment' de forma que se asegure la libertad y la igualdad de todos.

1 comentario:

josejazz dijo...

en efecto, es necesario por higiene democrática que haya un tercer partido con perspectiva nacional que corrija la deriva separatista que tenemos actualmente.