12 marzo 2011

ANIVERSARIOS, POLVOS Y FANGOS


Ayer 11 de Marzo se conmemoró de forma lamentablemente desunida el séptimo aniversario de la matanza de Madrid. Ni la tragedia terrorista más espantosa de la historia de España es capaz de unir las dos Españas que nos hielan el corazón. Nuestra clase política es tan sectaria que es imposible unir voluntades para llorar a 192 muertos y miles de mutilados y traumatizados.

Y la razón es clara: independientemente del cerebro que urdió la masacre -que ignoramos- y de sus intenciones -que también desconocemos-, el efecto logrado objetivamente, querido o no, fue un golpe de mano llevado a cabo por Zapatero y Rubalcaba para volcar unas elecciones ganadas en todas las encuestas por el PP, que utilizando mediáticamente el día de reflexión en medio de la torpeza del gobierno de Aznar llevó al PSOE al poder.

Se han cumplido recientemente treinta años del golpe del 23-F y seguimos creyendo que los autores del 'putsch' fueron un guardia civil enloquecido y un par de generales franquistas. ¡Santos inocentes! De la misma manera nos hemos creído que los autores del 11-M fueron un ladronzuelo asturiano loco y unos moritos de Lavapiés. ¡Santos inocentes! Naturalmente, y a Kennedy lo mató un chiflado solitario… El caso es que nunca se aclaran las actividades de los servicios secretos, nacionales y extranjeros. ¡Para eso son secretos!

Hoy 12 de Marzo se conmemora el 30º aniversario del "manifiesto de los 2.300", la primera denuncia de intelectuales -en su mayoría provenientes de la izquierda, allí comenzó el enterramiento de la izquierda nacional española, que apenas trata de resucitar desde algún partido neonato- de la limpieza etno-lingüística que se estaba cocinando en la Cataluña nacionalista de Pujol.

Naturalmente eso lo arreglaron fácil los nacionalistas; su brazo armado 'Terra Lliure' secuestró y tiroteó a unos de los principales firmantes del manifiesto, Federico Jiménez Losantos, y se acabó el problema. Ya lo había teorizado hace años el líder croata de la 'Ustacha' aliada de Hitler que llevó a cabo la limpieza étnica de serbios durante la Segunda Guerra Mundial: "Un tercio muertos, un tercio expulsados y un tercio convertidos".

Los polvos siempre traen lodos, y el hediondo y pestilente fango en que se encuentra sumida España proviene en gran parte del golpe de mano del 13 de Marzo de 2004 que perpetró el PSOE y de la limpieza étnica de nuestros nacionalistas catalanes, vascos y gallegos.

1 comentario:

Carmen Quirós dijo...

Muy interesante su entrada, como todas, Capitán. Que sepa que una de las visitas del contador de cada día, es la mía. Buenas noches.